
CUENTAME UN CUENTO: El Pájaro del Alma
11.11.2014 00:00Me invitaron a participar en este espacio de opinión, al que luego de un tiempo de dar vueltas pensando cómo contribuir, recurrí a mis queridos hijos para crear este artículo y contarles sobre cuentos que he leído como adulta, he pensado como psicóloga y he gozado como niña.
Elegí los cuentos infantiles porque son un maravilloso espacio de encuentro, comunicación y entendimiento con nuestros hijos, pero también con nuestro propio mundo emotivo y espiritual. Nos conducen a un viaje de anécdotas, fantasías y de la mano nos llevan también a recuerdos a veces muy guardados de nuestra propia infancia. Incluso, en algunos cuentos el sólo ver las imágenes que acompañan el relato, nos evocan emociones que a veces nos cuesta describir con palabras, pero que están presentes en nuestra historia.
Quisiera comenzar con el cuento “El Pájaro del Alma”, de Mijal Snunit (primera edición 1984) un clásico ya de literatura infantil contemporánea, el que comienza con la siguiente afirmación:
“Hondo, muy hondo,
dentro del cuerpo habita el alma.
Nadie la ha visto nunca
pero todos saben que existe.
Y no solo saben que existe,
saben también lo que hay en su interior.
Dentro del alma,
en su centro,
está, de pie sobre una sola pata,
un pájaro: el Pájaro del Alma.”
En el relato, el cuento nos muestra cómo éste pájaro también siente lo que nosotros sentimos en nuestro contacto y vivencias con el mundo exterior, y a su vez cómo en la fortaleza de su canto y la fragilidad de su pequeño cuerpo expresa esas emociones, de tristeza, alegría o rabia, a veces de forma asertiva y otras, más bien erráticas. Así también, de una forma ingeniosa nos invita a reconocer lo difícil que es dominar muchas veces estas emociones, algo que los niños, con su espontaneidad, lo viven con especial intensidad y que es importante que los adultos podamos naturalizar.
Mi hija de 4 años me ha hecho un par de veces dos preguntas que me resultan complejas: ¿Mamá, qué hay en el corazón?, o también ¿Qué pasa cuando una persona se muere (con el cuerpo?… con el corazón?). Bueno, estas dos preguntas apuntan a un tema central que desde una pronta edad empezamos a tomar conciencia, necesitando comprender lo que nos diferencia de los objetos, animales, elementos de la naturaleza, y nos hace humanos. Algunos diremos que es el lenguaje, otros el pensamiento crítico y una mayor conexión neuronal. Otros, incluso podríamos decir “¡Nada hijo, si somos también mamíferos!”. Explicar el concepto y naturaleza del alma y de las emociones a niños pequeños puede ser bastante difícil, pensando en que ellos necesitan de ejemplos más bien concretos y sencillos y en este punto es que “El Pájaro del Alma” con su relato y bellos dibujos ayuda a abrir una conversación sobre lo humano y para muchos también lo divino.
De esta forma, el cuento nos invita a comprender de una manera simple, y desde mi perspectiva, sin mayores preconcepciones religiosas, culturales y valóricas a explorar cómo vivimos las emociones y sensaciones de agrado y desagrado en nuestra corporalidad y a conectarnos con ella. Pero también nos invita a escuchar esa voz interior como consejera y guía en nuestro aprendizaje del mundo y autoconocimiento.
—————